Hace dos meses, en compañía del escritor Julio Vías, nos acercamos a la vertiente segoviana de la Sierra de Guadarrama, a los pies de La Mujer Muerta para encontrarnos con dos veteranos pastores. A continuación podéis disfrutar del texto de Julio Vías que acompaña a estas imágenes.
Nos citamos allí con Jesús Mari aprovechando que suele carear su rebaño en este tramo de la cañada Soriana Occidental que transcurre al pie mismo del cerro de Matabueyes, en el lugar conocido como “baldíos de Santillana”, un hermoso paraje presidido por los restos maltrechos del esquileo más importante que hubo en tierras de Segovia y dominado por el fondo solemne y majestuoso de las cumbres de la Mujer Muerta. Hacia finales de mayo, hasta aquí sube todos los años con 600 ovejas, la mitad de ellas de tronco merino con cruce castellano y la otra mitad merinas puras, desde la localidad de Escarabajosa de Cabezas, a donde vuelve a bajarlas a mediados de julio para aprovechar las rastrojeras tras la siega de los campos de cereal.
Acompañamos a Jesús Mari y a su pastor ayudante
Javier en su careo con elganado por los parajes situados al pie de la Cruz de
la Gallega, rozando los mismos límites del Parque Nacional de la Sierra de
Guadarrama. Durante el camino nos va contando su quehacer cotidiano y los problemas
a los que se enfrenta en el desempeño de su oficio, al igual que todos los
ganaderos de ovino segovianos. Su jornada comienza al amanecer atendiendo a las
ovejas paridas en su nave ganadera de Escarabajosa. Tras el almuerzo de las 9 de
la mañana sube hasta los baldíos de Santillana para carear con las ovejas horras durante el resto del día, desde
las diez de la mañana hasta las ocho y media de la tarde. Turnándose con sus hijos,
Jesús Mari saca tiempo además para atender la afamada carnicería Valverde Abad,
situada en el segoviano barrio de San Lorenzo, donde se puede encontrar uno de
los mejores lechales de la tierra bajo la denominación de “Cordero Segolechal”.
Jesús Mari nos habla de las
dificultades de mantenerse en este oficio por las constantes subidas de los
precios de los piensos mientras el precio del lechal se mantiene casi
invariable desde hace diez años, de los ataques de los buitres al ganado, y de
la amenaza cada vez más real y tangible creada por el retorno del lobo a la
sierra de Guadarrama. Emilio Asenjo, que también fue carnicero en Segovia, asiente
con la experiencia de sus ochenta años. Fue igualmente pastor desde niño y
trashumó con su ganado hasta el valle de Alcudia durante gran parte de su vida,
aunque los últimos diez años lo hizo en tren. Por ello conoce como nadie esta
cañada Soriana Occidental, más conocida como cañada “de la Vera de la Sierra”
por transcurrir en todo su recorrido de punta a punta por la provincia a lo
largo del piedemonte serrano.
Otro interesante artículo y fotografías de los oficios tradicionales del Guadarrama.
ResponderEliminar¿No hay ayudas para los daños de los lobos a los rebaños?
Creo que sí Alvaro. De esto habla Julio en los comentarios de esta entrada: http://juliovias.blogspot.com.es/2014/07/la-vaca-avilena-un-icono-del-guadarrama.html
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