Los que somos pedriceros disfrutamos apreciando los colores cambiantes de esta Reserva de la Biosfera única en el mundo con tan sólo 300 millones de antigüedad. Al atardecer las llambrías, domos y riscos se van tiñendo de tonos cambiantes, cálidos, que atraen nuestras miradas, con cierto asombro, aunque sean los mismos lugares de siempre. Paisajes que nos gusta contemplar y registrar con nuestra cámara, sin prisas, desplegando el trípode y dejando que la noche se acerque y borre por unas horas los "colores del granito"
La Pedriza es la de siempre, eres tú el que juega con la luz, y la luz, revoltosa, la que pinta el granito de forma caprichosa: cuarzo, mica, ortosa.
ResponderEliminarComo siempre, sabes captar lo esencial de cada cosa. Preciosas
ResponderEliminarSe nota que la Pedriza ocupa un trocito de tu corazón. Las raices nunca hay que perdeerlas. Son preciosas
ResponderEliminarGracias por vuestros comentarios, creo que la Pedriza es un lugar que enamora a quien la visita...
ResponderEliminarТака незбагненна краса природи!
ResponderEliminarФантастичне місце!
Ваші фотографії заворожують!
Gracias Juliana y también por comentarlo en ucraniano (es la primera vez en este blog). Para el que le interese la traducción viene a ser algo parecido a esto: "Esta belleza incomprensible de la naturaleza!Un lugar fantástico!
ResponderEliminarSus fotos un encanto!"