Así lo evidencian los restos de huellas fósiles que aparecen en las calles y fachadas de la población de Monsagro (Salamanca), un pequeño pueblo, con mucho encanto, que nos invita a pasear por las calles "decoradas" por sus vecinos con estas huellas de hace 480 millones de años, cuando la Península se encontraba, invertida 180º, muy cerca del Polo Sur en el período Ordovícico.
Hoy en día se puede visitar en Monsagro el Centro de Interpretación de los Mares Antiguos de Salamanca donde se explica con detalle todo lo referente a estas huellas fósiles realizadas por trilobites, gusanos y ondas del fondo marino.
Los fósiles más abundantes corresponden a las Cruzianas (desplazamiento de los trilobites), Rusophycus (zonas de reposo), Skolithos (galerías verticales de gusanos) y estructuras en forma de cono denominadas Daedalus. Enrique Campana nos mostró todos los rincones de este original pueblo situado en un entorno de gran riqueza medio ambiental.
En Monsagro también nos podemos acercar a las antiguas eras en pendiente, que se encuentran en una hermosa ubicación con vistas al valle del río Agadón y a la Sierra de la Peña de Francia y visitar su museo etnográfico.
Un lugar muy recomendable, desconocido por muchos, que bien merece la pena una visita.
Equipo utilizado: Pentax y Tamron
Más información: http://aytomonsagro.es/