Ayer decidí probar este objetivo cedido por Samyang Iberia sobre una Pentax K5II, es decir con un sensor APS-C que convierte, en este caso, la distancia focal a 50mm. Habrá que esperar a final de año cuando Pentax nos muestre su primera full frame para volver a probarlo con su focal real de 35mm.
Como podéis ver en estas sencillas imágenes que corresponden a la ruta que recorre el arroyo del Aguilón, la calidad y resolución de esta óptica es sensacional, así como su construcción y acabado en materiales duraderos. Como ocurre con este tipo de objetivos el enfoque es manual, muy suave y fiable, además de contar con escala de profundidad de campo, algo que se echa de menos en muchas ópticas más caras. Los que hemos probado equipos tradicionales sabemos la importancia de "esta ayuda" para buscar la distancia hiperfocal.
Me ha bastado un día para comprobar la robustez y calidad de esta óptica, una interesante alternativa a tener en cuenta si la comparamos con otras primeras marcas. Un buen "compañero" para llevar en la mochila que aporta una definición excelente y sin apenas aberraciones cromáticas incluso disparando a contraluz.
