Ahora que son muchos los que empiezan las vacaciones no puedo evitar recordar alguno de mis siete viajes que he realizado durante varios años a los Andes bolivianos. Son numerosas las experiencias vividas allí, de amistades, de éxitos y fracasos, aunque siempre parece que preferimos quedarnos con los buenos recuerdos. En Bolivia, en compañía de mi mujer y varios de mis mejores amigos conseguimos disfrutar de una naturaleza en estado puro, realizando primeras ascensiones a nevados inescalados o descubriendo Santuarios de Altura precolombinos en sus cimas andinas.
También nos dimos cuenta de la realidad social de uno de los países más pobres de América latina. Me viene a la mente la insistencia de un campesino cuando descendíamos del Cerro de Santa Vera Cruz, me seguía pidiéndome "un pedazo de la cruz de oro" que según él y, seguramente la tradición, se encontraba en la cumbre de esta montaña. Lo cierto es que oro no encontramos, pero sí son muchos los tesoros que permanecen ahora en el recuerdo. Un país para regresar algún día...
Unas fotografías excelentes, la última de la bici es espectacular. Ya terminé el libro, me ha gustado mucho y te voy ha robar algún truquillo que otro, jejeje...
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias por tu comentario de las fotos y por el del libro y es un placer poder compartir contigo "los truquillos" que comentas
ResponderEliminarJavier, estas fotografía me traen muy buenos recuerdos, espero que además de colgar la foto del Salar en el blog, la podamos poner pronto en casa.
ResponderEliminarBesotes