El domingo subí a la Pedriza con mi buen amigo Alvaro. Buscábamos un itinerario tranquilo y decidimos ascender por el solitario Callejón de las Abejas hasta el collado de la "U", para después enlazar con el collado de la Ventana. Durante el recorrido no vimos cabra alguna, pero cuando nos detuvimos a comer algo en el último collado apareció un pequeño grupo familiar de cabras montesas que, lejos de huir de nuestra presencia, se dejaron "retratar" mostrando su natural belleza.
Después, en casa, visualizando las fotos, decidí editar una serie de "retratos a pares", uniendo o repitiendo dos imágenes previamente convertidas a blanco y negro. El fondo blanco me pareció que resaltaba los motivos principales, dándoles un aspecto de retratos que casi parecen "de estudio".
Bastante chulas, sobre todo la última
ResponderEliminarMuchas gracias Rubén, espero verte pronto.
ResponderEliminarUn abrazo